viernes, 29 de junio de 2012

Simultaneidad

Vivir físicamente en un país pero intelectual y emocionalmente en dos es "harto complicao". Eso me pasa. Con simultaneidad estoy pendiente de lo que ocurre aquí en Chile pero no pierdo pista de lo que sucede en Venezuela. Me fijo en el clima de ambos países. De los asuntos de aquí y de allá. Me niego a prescindir de alguno. No soy turista aquí pero no he emigrado de mi país. Soy habitante de dos naciones. Raro y difícil. Pero posible. Anoche el desvelo me lo produjo la mas reciente imbecilidad del gobierno venezolano. Lo de Globovision no es mas una acción de sátrapas. De gobierno prepotente. De instituciones vendidas a la antidemocrática causa de la ridícula revolución. A las tres de la mañana pude calmarme. Luego de rezar conseguí conciliar el sueño.

lunes, 11 de junio de 2012

Cambio de guión

Vimos por internet lo de ayer en Caracas. No quiero recurrir a adjetivos que ya me suenan a muy usados. Pero o encuentro la palabra adecuada. Creo que lo que sucedió fue luz. Eso, sentir que un país en penumbras encendió luminarias. Esa luz no proviene de Henrique, sino de la gente. Pero Henrique puso en on el switche. Rompió con todos los esquemas. No fue presentado por un político. No hizo un discurso largo. Cambio de guión en un país que ya esta mas que harto de regaños, de gritos, de estúpida palabrería, de cursi patrioterismo, de héroes de pacotilla. Anoche me fui a dormir sobre un colchón de entusiasmo. Y desperté con una sonrisa imborrable.

viernes, 8 de junio de 2012

Lejos po...

Desde estas tierras nerudianas, Venezuela se siente lejos, muy lejos. Yo me escribo casi todos los días con alguien de mi familia. Arnaldo igual, con sus hijos y sus hermanos. Pero eso no evita la nostalgia. Sabía yo que esto nos habría de pasar. Si me ocurrió cuando me fui a París estando muy joven, a esta edad de ahora era inevitable.  Mas no pensé que el guayabo me entraría tan rápido y que este cuerpo necio sería tan frágil. No ayuda que tuvimos tres días de un frente frío que nos sumergió en temperaturas incluso bajo cero. Y de seguro si la calefacción hubiera funcionado bien no me sentiría apesadumbrada. Pero cuando la necesité, falló. Ya llamamos a la inmobiliaria para que vengan a arreglarla. La distancia es un estado de ánimo. El dia exhibe su mejor cara, con cielo azul. Venezuela está lejos. Como dicen los chilenos, lejos po...

viernes, 1 de junio de 2012

Henrique

Confieso que estoy harta de estar harta, lo cual es el hartazgo elevado a la ene potencia. Pero ese hastío, ese cansancio que penetra cada poro, comienza a deshacerse cuando leo cada día la travesía de Henrique por el país buscando convencer a la gente y contagiarla del genuino deseo de progresar, sin ser esclavos de un estado obeso, aplastante e inhumano. Yo conozco mucho a Henrique. Pudo rendirse. Y no lo hizo. Pudo escaparse. Y no lo hizo. Pudo olvidar. Y no lo hizo. Pudo descarriarse, venderse, corromperse. Despegarse, desconectarse, desentenderse. Y no lo hizo. A los hombres no se les mide por lo elevado de sus gritos sino por la honestidad de sus susurros. Y los de Henrique los he escuchado. En momentos buenos y en momentos malos. Cuento los días. Apenas pudo esperar.